La importancia de la retención después del tratamiento de ortodoncia

Después de completar un tratamiento de ortodoncia para corregir la alineación de los dientes, es importante mantener los resultados obtenidos. Esto se logra a través del uso de retenedores. Los retenedores son dispositivos hechos a medida que ayudan a mantener los dientes en su nueva posición, evitando que se muevan de nuevo a su posición original. La retención después del tratamiento de ortodoncia es una parte crítica del proceso y es importante que se tomen en serio.

El período de retención comienza después de que los brackets o alineadores invisibles son removidos. Durante este tiempo, los dientes están en una fase de transición en la que necesitan tiempo para estabilizarse en su nueva posición. La duración del período de retención depende del caso individual y puede variar de unos pocos meses a varios años. La mayoría de los ortodoncistas recomiendan que los retenedores se usen de manera constante durante los primeros seis meses después de la remoción de los brackets o alineadores invisibles.

Existen dos tipos principales de retenedores: fijos y removibles. Los retenedores fijos se colocan en la parte posterior de los dientes, detrás de las arcadas dentales. Son una opción popular porque son cómodos y discretos, y no se pueden perder. Los retenedores removibles son dispositivos similares a los alineadores invisibles utilizados durante el tratamiento de ortodoncia. Deben ser removidos para comer, cepillarse los dientes y para limpiarlos.

Es importante seguir las instrucciones del ortodoncista sobre cuándo y con qué frecuencia usar los retenedores, ya que la falta de uso puede resultar en una recurrencia de la maloclusión y la necesidad de un tratamiento adicional. Si bien los retenedores son muy efectivos para mantener la alineación de los dientes después del tratamiento de ortodoncia, no son una garantía de por vida. Los dientes pueden moverse con el tiempo debido a factores como el envejecimiento y la pérdida de dientes. Por esta razón, es importante programar citas regulares con el ortodoncista para revisar la posición de los dientes y determinar si se necesitan ajustes o una nueva fase de tratamiento.

Además, es importante tener una buena higiene oral durante el período de retención. Los retenedores pueden acumular placa y bacterias, lo que puede provocar mal aliento y enfermedades periodontales. Para mantener los retenedores limpios, es importante cepillarlos regularmente con agua y pasta de dientes, y utilizar una solución de limpieza especial para retenedores removibles.

En resumen, la retención después del tratamiento de ortodoncia es una parte esencial del proceso. Los retenedores ayudan a mantener la alineación de los dientes en su nueva posición y evitan que se muevan de nuevo a su posición original. Es importante seguir las instrucciones del ortodoncista sobre el uso de los retenedores y programar citas regulares para monitorear la posición de los dientes. Además, mantener una buena higiene oral es esencial para mantener los retenedores limpios y prevenir enfermedades periodontales. Con el cuidado adecuado, los resultados del tratamiento de ortodoncia pueden durar toda la vida.